March 7, 2022
As we move into March, I want to delve deeper into a topic I started in January—the idea that employee engagement and well-being is mission critical for successful organizations. What strikes me as most important is finding ways to fully engage employees in well-being programs. In my research on the topic I found three concepts that made sense and seem very worthy of the investment of time and resources.
At ICF insights, I found this nugget written by Katrin Homer.
1. Find your well-being story, and then personalize it.
This article stresses the importance of being clear about what story we, as company leaders want to tell our employees about how we value employee well-being. The author suggests that once you “Identify this central, compelling narrative, you should then build specific communication for different groups/audiences” throughout the organization. Because employees have different needs, any CEO’s well-being message needs to be as relevant as possible to the audience. According to the 2021 World Trend Index report from Microsoft and Edelman, taking a segmented approach to your communications results in a significantly higher engagement of the message.
Homer also shared that increasingly, organizations are creating networks of trained employees to directly support and engage staff in employee well-being programs. “These human support networks work alongside an organization’s other resources—such as an employee assistance program (EAP) or a digital well-being hub and are trained communicators of the company’s well-being story.” With training and ongoing support, these well-being ambassadors can help to create an organizational culture where regular conversations with colleagues about well-being are commonplace.
2. Tailor well-being programs to employee interests.
This idea of a layered approach to employee engagement is also supported by recent Gallup polls. According to the Gallup, companies are most successful at creating a culture of well-being when they provide managers with the right tools for a holistic, multifaceted approach.”
By tailoring well-being program offerings, we can create value for participants and the organization. Surveys on needs and interests, interviews, and focus groups are good ways to understand what is important to employees. Employers also can learn what kind of rewards, from water bottles to gift cards, might be good incentives for employees to attend an event or take a survey. They also can gain insight into what might motivate employees to make changes for a healthier lifestyle.
3. Include an Educational Component.
According to Corporate Wellness Magazine, successful employer-based wellness programs include an educational component. In order to encourage employees to get and remain healthy, employers need to constantly reinforce the benefits of a healthy lifestyle. The educational aspect of wellness programs rely on a mixture of paper handouts, instructor-led courses (in person and online) and coaching to keep individuals motivated around health and wellness issues.
The beauty of wellness programs is that every employee can be reached via online options. According to a report titled, “WORKING WELL: A Global Survey of Health Promotion and Workplace Wellness Strategies,” produced by Buck Consultants, the fastest-growing components of wellness initiatives are technology-driven tools such as Web portals and online healthy lifestyle programs—which are expected to increase 100 percent or more over the next three years.
8 de marzo de 2022
Involucrar a Nuestros Empleados en Programas de Bienestar Social
A medida que avanzamos hacia marzo, quiero profundizar en un tema que comencé en enero: la idea de que el compromiso y el bienestar social de los empleados son una misión crítica para las organizaciones exitosas. Lo que me parece más importante es encontrar formas de involucrar plenamente a los empleados en programas de bienestar social. En mi investigación sobre el tema, encontré tres conceptos que tenían sentido y que me parecían muy dignos para invertir el tiempo y los recursos.
En los conocimientos de ICF, encontré esta muestra escrita por Katrin Homer.
1. Encuentra tu historia de bienestar social y luego personalízala.
Este artículo enfatiza la importancia de tener en claro cúal historia nosotros, como líderes de la empresa, queremos contar a nuestros empleados sobre cómo valoramos el bienestar social de ellos. La autora sugiere que una vez que “identifiques esta narrativa central y convincente, debes construir una comunicación específica para diferentes grupos oaudiencias” dentro de toda la organización. Debido a que los empleados tienen diferentes necesidades, el mensaje de bienestar social de cualquier Presidente Ejecutivo debe ser, el más relevante posible para la audiencia. Según el informe del 2021 World Trend Index de Microsoft y Edelman, adoptar un enfoque segmentado de tus comunicados da como resultado una participación significativamente más fuerte del mensaje.
Homer también compartió que cada vez más, las organizaciones están creando redes de empleados capacitados para apoyar e involucrar directamente al personal en los programas de bienestar social para empleados. “Estas redes de apoyo humano trabajan junto con otros recursos de laorganización, como: el programa de asistencia al empleado (EAP) o la plataforma digital de bienestar social, los cuales son todos comunicadores capacitados de la historia de la organización de bienestar social.” Con capacitación y apoyo continuo, estos embajadores del bienestar social pueden ayudar a crear una cultura organizacional donde las conversaciones regulares con colegas sobre el bienestar social sean comunes.
2. Adapta los programas de bienestar social a los intereses de los empleados.
Esta idea de un enfoque en capas para el compromiso de los empleados también está respaldada por encuestas recientes de Gallup. Según Gallup, las empresas tienen más éxito en la creación de una cultura de bienestar social cuando proporcionan a los gerentes las herramientas adecuadas para un enfoque holístico y multifacético”.
Al adaptar los ofrecimientos de los programas de bienestar social, podemos crear valor para los participantes y la organización. Tanto las encuestas sobre necesidades e intereses, las entrevistas y los grupos focales son buenas maneras de darse cuenta de lo que es importante para los empleados. Los empleadores también pueden saber qué tipo de recompensas; desde las botellas de agua hasta las tarjetas de regalo, podrían ser buenos incentivos para que los empleados asistieran a un evento o realizaran una encuesta. También pudieran obtener información sobre lo que podría motivar a los empleados a hacer cambios para un estilo de vida más saludable.
3. Incluir un Componente Educativo.
Según Corporate Wellness Magazine, los programas exitosos de bienestar social fundamentados en el empleador incluyen un componente educativo. Con el fin de alentar a los empleados a obtener y permanecer saludables, los empleadores deben reforzar constantemente los beneficios de un estilo de vida saludable. El aspecto educativo de los programas de bienestar social se basa en una mezcla de folletos en papel, cursos dirigidos por un instructor (en persona y en línea) y capacitación para mantener a las personas motivadas en torno a los problemas de salud y bienestar.
La belleza de los programas de bienestar social es que se puede llegar a todos los empleados a través de opciones en línea. Según un informe titulado “WORKING WELL: A Global Survey of Health Promotion and Workplace Wellness Strategies”, producido por Buck Consultants, los componentes de más rápido crecimiento de las iniciativas de bienestar social son herramientas impulsadas por la tecnología, como portales web y programas de estilo de vida saludable en línea, que se espera que aumenten un 100 por ciento o más en los próximos tres años.